¿Qué Ley rige las comunidades de propietarios?
La mayoría de la gente vive en una comunidad de vecinos, ya sea en bloques de pisos o en urbanizaciones con elementos comunes. No solo se pertenece a una comunidad de vecinos por ser propietario de una vivienda, también si se es propietario de un garaje o un local que pertenece a la urbanización o edificio de viviendas.
Como resultado, cuando perteneces a una comunidad de vecinos debes seguir una normativa en la que se detallan los derechos y deberes de los propietarios y que regula las actividades que están permitidas y las que no. En este artículo te hablaremos de las leyes por las que se rige una comunidad de vecinos.
Ley que regula una comunidad de propietarios
La ley que se aplica en las comunidades de vecinos y fincas comunes es la Ley de Propiedad Horizontal del 21 de julio de 1960, aunque hasta el día de hoy se han producido diferentes modificaciones. La propiedad horizontal aparece en el artículo 396 del Código Civil, donde dice que una persona será dueña de una propiedad horizontal siempre que para entrar o salir de la misma tenga que utilizar las zonas comunes que usan los demás propietarios. Un ejemplo sería un bloque de pisos al que se accede por un portal, una escalera o un ascensor comunitario para todos los vecinos.
En el caso de una casa individual o un chalet también se podría considerar propiedad horizontal si comparte zonas comunes con otras propiedades, por ejemplo una piscina comunitaria, una pista de tenis o de pádel, etc..
En resumen, en el momento que haya un elemento que sea común para todos los vecinos se aplicará la Ley de Propiedad Horizontal para regular su convivencia. Hay que recordar que una comunidad de vecinos está constituida por todos los pisos y locales y las zonas comunes que se encuentran en la finca.
Cuando se constituye la comunidad de vecinos deben describirse perfectamente todas las instalaciones comunes y servicios con los que cuenta la finca. También debe indicarse la extensión de los pisos y locales, si los hubiera, la planta en la que están, las propiedades con las que linda la finca y otras zonas anejas como los garajes y trasteros.
Dependiendo de la superficie de cada inmueble o local tiene una cuota de participación determinada que será lo que deberá pagar cada propietario por los gastos de la comunidad.
En caso de que una comunidad de propietarios no se haya constituido como propiedad horizontal pero reúna todos los requisitos descritos en el artículo 396 del Código Civil, se regirá igualmente por la Ley de Propiedad Horizontal.
Por otro lado, también están amparados por esta ley los llamados “complejos inmobiliarios privados”, que son varios edificios de viviendas que comparten zonas comunes e instalaciones deportivas como piscinas, gimnasios o pistas de pádel e instalaciones de ocio como parques infantiles, por ejemplo.
A la hora de constituir la comunidad de propietarios, estos complejos de viviendas pueden hacerlo como una única comunidad o como una agrupación de comunidades de vecinos. En este supuesto, cada comunidad tendrá una cuota de participación sobre todo el complejo.
Obligaciones de todos los propietarios
La Ley de Propiedad Horizontal determina una serie de obligaciones para todos los propietarios, tanto para los elementos privativos como para los comunes. Vamos a ver las más importantes:
- Cada propietario deberá contribuir a los gastos de la comunidad según su cuota de participación.
- Deberá conservar en buen estado su vivienda o local y las zonas comunes.
- No se llevarán a cabo actividades ilícitas, que resulten peligrosas, molestas, insalubres o que causen algún daño a los vecinos. En caso de que se produzcan el causante de las mismas deberá responder ante el resto de vecinos.
- Se deben respetar todas las instalaciones y no alterar ningún elemento arquitectónico o servicio si perjudica la configuración, la seguridad o el exterior de la finca. También si perjudica los derechos de los demás propietarios.
- Los propietarios deben permitir la entrada a su vivienda o local de los operarios para realizar cualquier reparación que fuera necesaria en los elementos estructurales que sean de la comunidad.
Es importante disponer de una ley que regule las comunidades de propietarios y normativas particulares para cada comunidad, de esta forma, cualquier vecino sabe lo que puede y no puede hacer y, en caso de no respetar las normas, podría ser amonestado.
En estos casos, es recomendable contar con el asesoramiento de un administrador de fincas, que es el encargado de mediar en los posibles conflictos entre vecinos y el que conoce a la perfección la legislación vigente para aplicarla en caso necesario.
En LPM Administradores de Fincas somos expertos en la gestión de comunidades de propietarios y conocemos a la perfección la Ley de Propiedad Horizontal para solucionar cualquier conflicto. Contacta con nosotros y solicita un presupuesto sin compromiso. Estaremos encantados de escucharte.